Qué es....

viernes, 27 de marzo de 2015

Cambios Expresiones Culturales Pueblo Ticuna. Por: Deyanet Garzón




DEYANET GARZÓN

CUADRO COMPARATIVO CULTURAL DESDE LOS PUEBLOS TICUNA DE LA AMAZONIA
EN LA FRONTERA BRASIL PERÚ, COLOMBIA

La ciudad de Leticia es la capital del departamento del Amazonas y fue fundada el 25 de abril de 1867. Está ubicada en el sur de la Amazonia colombiana, a 1 100 kilómetros de Bogotá, haciendo frontera con Perú y Brasil. Por ser ciudad de frontera y estar rodeada de floresta la comunicación con el resto del país es muy limitada físicamente y solo se llega a ella por vía aérea.
La mayor parte de la población es de ascendencia indígena y están presentes diversos grupos étnicos: Boras, Huitotos, Ingas, kokamas, Ticunas, entre otros. Actualmente hay un gran crecimiento demográfico dado la presencia de personas que llegan de otras regiones del país las cuales encuentran oportunidades de trabajo, negocio, dinero o turismo. Leticia se ha convertido en un sitio turístico por su conexión con Brasil y Perú, que hace de ella una ciudad con grande comercio y movilidad.

La región se caracteriza por sus manifestaciones culturales que reflejan una mezcla de influencias de las culturas de los tres países, además de la influencia de los pueblos originales como el Ticuna. Dado que esta es la población indígena más numerosa en esta frontera, y son las comunidades indígenas las que marcan las expresiones culturales de esta parte de Colombia, me basaré en los cambios culturales de este pueblo para realizare este cuadro comparativo de las expresiones culturales hace 30 años y ahora, sobre todo, teniendo en cuenta  la experiencia reciente que tuve de acompañar las comunidades ticuna del Trapecio amazónico, a través de un proyecto de fortalecimiento cultural, mediante el cual se buscaba justamente hacer con la comunidad memoria de los elementos culturales que son columna vertebral de estas comunidades y que se han ido perdiendo por diversas situaciones e influencias por las cuales pasan estas poblaciones. Mediante esta actividad que duro un año de acompañamiento fue posible retomar con las comunidades expresiones culturales fundamentales para estos pueblos como son la construcción de la maloca central y la memoria, organización y preparación de la fiesta de la pelazón, con todos los rituales y demás expresiones culturales que la acompañan. Presento aquí algunos elementos observados y vivenciados junto a las comunidades ticuna, especialmente la comunidad de San Martin y Nuevo jardín – Leticia, Amazonas

Expresiones y vivencias culturales de los pueblos ticuna en la frontera amazónica de Brasil Perú, Colombia, especialmente entre las comunidades en las riberas del Amazonas  - Leticia
Expresiones y vivencias hoy
Sistema de vivienda, alimentación y cultivo
El señor Alfonso Ángel Pereira De la comunidad de San Martin, en la actividad de organización para la construcción de la maloca en su comunidad, cuenta que antiguamente, cuando él era niño, los ticuna vivían en malocas aisladas que era rectangulares, cubiertas con palma de caraná, el piso se hacía de pona y las columnas principales de madera maciza. La inauguración iba acompañada de un ritual en el cual se le daba el nombre a la maloca...
Antiguamente vivían más de la pesca y la caza y la práctica de la horticultura y recolección de frutos de la selva. El cultivo de las chagras se hacía por medio de la tala y quema con un ritual y se hacía una dieta para ello y eran las mujeres las que sembraban y los hombres limpiaban el terreno. Los principales productos sembrados eran la yuca, plátano, caña de azúcar, maíz. La chagra se desyerba periódicamente y era trabajo colectivo. La recolección de la cosecha se realizaba según las necesidades del momento, es decir, no se efectúa toda de una vez. Una familia en promedio podía poseer tres chagras en diferente estado de desarrollo.
Antiguamente la caza también era colectiva, y usaban como instrumentos el arco y la flecha, lanzas, trampas y cerbatana. El producto de la caza era llevado a la maloca y repartido entre todos. Tenían así una buena dieta que dependía totalmente de la selva.
Los elementos artesanales eran para el uso doméstico o de rituales como la construcción de hamacas y canastos y trajes

















Organización sociopolítica
Antes los ticuna se organizaban comunitariamente mediante el sistema de alianzas matrimoniales, que por una parte se establecían entre primos cruzados y por otra parte significan la distinción de mitades en cada comunidad.
Todo el sistema social estaba tejido por la relación naturaleza cultura.  El mundo natural estaba concebido como un todo, en el que se contemplaba e orden de lo humano y su cultura, como una parte más del orden de las plantas, los animales de monte y los "seres del agua".
Además de esta organización familiar y social, en las aldeas Ticuna existía el Curaca, que era como el cacique o coordinador de la vida social de la aldea. Era siempre un mayor con capacidad de coordinar el grupo, con credibilidad y conocimientos de su cultura y muchas veces era al mismo tiempo el chamán o jefe espiritual. Los poderes mágicos de los chamanes nacían de su relación con los espíritus de la floresta. Una persona que quisiera ser chamán debía ser iniciada por otro chamán reconocido, para que lo pusiera en contacto con dichos espíritus. Este era instruido en las noches por un tiempo determinado, al cabo del cual el nuevo chamán podía curar por medio de succión de tabaco y aplicación de hierbas y otras sustancias medicinales. Durante el período de aprendizaje él debía abstenerse de relaciones sexuales y seguir una dieta especial. Antes en la comunidad todos conocían la lengua ticuna, sus rituales principales, mitos y cantos tradicionales. Las enseñanzas y saberes tradicionales eran dadas por el chamán o mayor dentro de la maloca y la comunidad mantenía la unidad siguiendo estas tradiciones que le daban solidez y fuerza.

Mitos y fiestas tradicionales
Varios mayores de la comunidad, entre hombres y mujeres hicieron memoria de cómo eran las fiestas tradicionales, especialmente describieron el ritual principal, la pelazón, mediante un momento comunitario para recordar aspectos que hacen parte de este ritual del ciclo vital también conocido como ritual de la pubertad y preparar esta fiesta con sus comunidades retomando estas tradiciones. Recordaron algunos aspectos como:
La niña que tenía por primera vez la menstruación era retirada de la familia y colocada en un lugar cerrado por lo menos por un año, y solo su madre y abuelas podían verla, llevarle la comida y enseñarle aspectos de la tradición propios de la mujer ticuna que le daban condiciones de organizar su propia familia
El padre y demás hombres de la familia se encargaban de preparar la fiesta: la caza, la pesca y productos de la chagra para tener abundante comida.  También elaboraban las máscaras que eran usadas en el ritual, con yanchama, una fibra de un árbol, las pintaban con tinturas vegetales, diseñando figuras de animales e otros seres míticos. Los hombres también elaboraban tambores con piel curtida de venado, templada con fibra de chambira sobre una caja de resonancia de corteza de madera. Estos tambores eran para el ritual y se tocaban siempre con el mismo son en cuanto dure la fiesta.
Las mujeres hacían los collares entretejiendo sobre una fibra de chambira, con plumas de colores, semillas, caracoles y huesecillos de animales con los cuales adornaban la niña.
La fiesta duraba hasta tres días o más según durara el masato hecho de yuca fermentada. Durante la fiesta la niña era sacada de su encierro y presentada a la comunidad, adornada con pintura facial y corporal, vestida con yanchama y su cabeza adornada con diadema de plumas. Los participantes danzaban al ritmo de tambores, flautas y cantos rituales, adornados con pintura facial y corporal, y vestidos con máscaras y yanchamas. Durante la fiesta y la danza, a la niña se le arrancaba el cabello desde la raíz como símbolo de cambio físico y de vida. Al finalizar la fiesta todos se dirigen al rio llevando la casa de encierro donde estuvo la niña y esta es sumergida en el rio por el chamán y junto con ella son tirados estas maderas de la casa de encierro como expresión de una etapa que termina
Sistema de vivienda, alimentación y cultivo
Actualmente la mayoría de los Ticuna del trapecio amazónico están organizados en comunidades a lo largo del río Amazonas o cerca de éste y ya no habitan en malocas sino en casas en forma de palafitos por causa de la creciente del rio, que van formando poblados. Actualmente muchos indígenas entre los más jóvenes, hasta los 45 años, aproximadamente dijeron que no conocen lo que es una maloca.
Esta formación de poblados hace que el espacio productivo se concentre alrededor de las comunidades y esto determina una sobreexplotación del territorio alrededor de las comunidades.

Ya no poseen varias chagras como antes. Las condiciones actuales de deforestación y cambio climático y la presencia de artefactos de navegación o eléctricos hacen que los animales de caza cada vez se alejan hacia el centro de la selva, escasean los alimentos y la cercanía a la población blanca y los proyectos asistencialistas del Estado, hacen que cambien los hábitos de alimentación introduciendo en la dieta alimentos industrializados traídos de la ciudad.
 Cultivan menos la chagra y dependen más del comercio, el turismo y servicios en instituciones locales. Aun si siguen practicando la pesca y la caza, esta es una actividad menos colectiva, y la realizan con escopeta dejando a un lado   instrumentos tradicionales. La pesca puede ser labor comunal o individual. Se realiza por lo general a una distancia considerable del lugar habitado. Se usan arpones de diferentes tipos, anzuelos, nylon, trampas y también las mujeres y niños realizan esta actividad. Pero se puede decir que aún permanece la pesca, la caza y algunos productos de la chagra como el plátano y la yuca como base de la alimentación. Algunos de estos productos son comercializados en Leticia, especialmente la fariña y la yuca. Actualmente los elementos artesanales son creados más para la comercializan y para vender a los turistas que visitan a sus comunidades. También en las comunidades hay tiendas en las que venden productos de la ciudad, alimentos, ropa, bebidas alcohólicas, entre otros. Y es común ver televisores, grandes equipos de sonido que sueltan la música de la ciudad y es común el uso de celulares y otros equipamientos tecnológicos.
Organización sociopolítica
Aún permanece en las comunidades el sistema de alianzas matrimoniales, pero también hay alianzas entre indígenas de diferente grupo étnico y con blancos, lo que en ocasiones es causa de conflicto entre las familias. Actualmente han surgido otras formas de agrupación social tomadas de los no indígenas: la enfermería como sustituta del saber chamánico; las escuelas que tienden a reemplazar la educación informal; la Defensa Civil, la Policía Cívica y la Junta de Acción Comunal, que tienden a reemplazar al Curaca;
Hoy en día, aún existe la persona designada como Curaca pero es elegida por toda la comunidad por votación, por un período de dos años y ya no se escoge entre los mayores de la comunidad sino que, al contrario, regularmente son los jóvenes los que pasan a ocupar este cargo, lo que también ocasiona confrontaciones intergeneracionales.
La educación formal es presente en las comunidades, cada comunidad tiene una escuela que cubre hasta tercero de primaria pero aún se mantiene la lengua materna.  Para la culminación de la primaria los niños son remitidos a los internados de Puerto Nariño y Nazaret sobre el río Amazonas, o al internado de Tarapacá. Los jóvenes que desean continuar la educación secundaria vienen para Leticia lo que provoca mayor desarraigo de sus tradiciones.









Mitos y fiestas tradicionales
Con el desaparecimiento de la figura del chaman también por  la fuerte influencia religiosa católica y protestante, las relaciones interétnicas que se dan con otras culturas indígenas y con la cultura occidental, y los intercambios interfronterizos,   desaparecen los conocimientos tradicionales de medicina tradicional, los mitos y la mayoría de los rituales y solo algunas comunidades conocen sobre estos y muy pocas, especialmente las del lado del Brasil, son las que lo practican,  como ocurre con el ritual de la pubertad o  "pelazón". Así, se han generado fuertes cambios en la mitología y en aspectos rituales y sociales.
En lo mitológico y ritual han sido influidos directamente por las prácticas religiosas cristianas, tanto protestantes como católicas, lo cual se expresa en la transformación del mito de origen Yoi que pasa a ser remplazado o asemejado a la figura de Jesucristo y las comunidades están marcadas por la construcción de la capilla y no más por la maloca.


Conclusiones:

Las comunidades ticunas del trapecio Amazónico tienen una historia marcada por influencias étnicas desde el proceso de la conquista, por la presencia de colonos, e otras poblaciones indígenas en sus territorios, lo que ha generado grandes cambios relacionales, de organización y convivencia. Se puede percibir procesos fuertes de cambio marcados por la presencia de expresiones culturales occidentales que han hecho entrar en desuso la propia lengua, los rituales y organizaciones social propia que al estar íntimamente relacionada con la tierra, fragiliza la propia identidad. Así aunque se conserven algunos mitos, tradiciones, costumbres, elementos de organización social es fuerte la influencia de la tecnología y de la globalización y aunque la cultura es dinámica y va enriqueciéndose y cambiando con los cambios sociales, geográficos, ambientales del propio territorio o región y va siendo influencia por otras manifestaciones culturales, no podemos desconocer que la fuerza de la cultura moderna va penetrando y absorbiendo la identidad de estas comunidades y anulando sus elementos propios. Y, aunque la cultura se teje, como lo expresa Canclini, desde las relaciones de significado que se reconstruyen mediante la mezcla, desde esta experiencia se observa no tanto una mezcla como si un desplazamiento y anulación de los propio, lo que poco a poco termina en una asimilación e ¨integración en la cultura del otro¨ que lleva a la anulación de si y la negación de lo que se es, para poder ser reconocido, que en ultimas lleva al propio exterminio.

Referencias bibliograficas

TORRES C., William, 1985. "Diagnóstico etnológico de la Comunidad Ticuna de San Martín de Amacayacu". Parque natural Amayacu, Comisaría del Amazonas, Cuadernos de Antropología N° 2, Departamento de Antropología, Universidad Nacional, Bogotá.
, 1986. "Ecología y tradición oral (Witoto y Ticuna"; en: revista Nuestra América Mestiza, N° 6, pp. 26-29, Universidad Distrital, Bogotá.
VASQUEZ RUA, Stella, 1970. Algunos aspectos de la cultura Ticuna. Tesis de grado, Departamento de Antropología, Universidad de los Andes, Bogotá.

Registro fotográfico

















No hay comentarios:

Publicar un comentario